«¿Seremos simples mascotas tecnológicas de la Inteligencia Artificial? Descubre lo que un pionero de la IA predijo hace más de 50 años»

“Una vez los ordenadores tomen el control, es posible que no lo volvamos a recuperar. Tendremos que sobrevivir a su tolerancia. Si tenemos suerte, nos mantendrán como animales domésticos”

¿Quién dijo esto?

No fue Elon Musk.

Lo dijo uno de los precursores de la IA en 1960s, Marvin Minsky.

Este último, junto con Alan Touring, son considerados los auténticos padres de la IA.

Allá por los años 40 Alan Touring sacó un escrito donde decía lo “que se podría hacer”. Y Marvin Minsky más tarde sacó otro donde dijo el “qué hacer”.

Lo que ha quedado claro es que la IA está para ayudar a las personas a tener una mejor vida.

Nos guste más o menos.

Las empresas tienen que integrar estas metodologías en sus procesos porque la transformación consiste en convertir a las empresas en “inteligentes”.

Es cierto que puede parecer que la IA piensa como nosotros porque parece que actúa como tal pero no funciona de la misma manera.

La IA no ve lo que nosotros vemos, no piensa como nosotros pensamos y, de hecho, no piensa en absoluto. Está simplemente preparada para reconocer y percibir. En reducir los problemas en pequeñas tareas y estás en más pequeñas y, así, sucesivamente.

Y, por eso, tenemos que saber diferenciar dos cosas:

Las máquinas nunca lo podrán a hacer de los humanos haremos algunas tareas mejor que las máquinas.

Y esto cuanto antes lo aceptemos mejor. Me refiero a las habilidades interpersonales.

¿Qué hubieran podido hacer Alan Touring y Marvin Minksy si hubieran podido tener acceso a nuestros chips de hoy en día?

Magia, como mínimo.

La pregunta que hay que intentar responder desde un punto estratégico es la siguiente:

¿Cómo podemos hacer que las personas y los ordenadores estén conectados de manera colectiva?

El objetivo es trabajar en equipo y de manera más inteligentemente y crear una inteligencia colectiva sustentada en la IA.

¿Cómo el arte de preguntar se ha convertido en la clave del 2023?

El arte de preguntar va a ser clave en 2023 y entender cómo hacerlo a una IA te puede ayudar mucho.

Ayer hice un ejemplo y quiero compartirlo por aquí.

Y es que, el saber preguntar debe de componerse de:

– Un conocimiento de la materia y del contexto.
– Ser claro para formular preguntas concretas y concisas.
– Habilidad para escuchar y crear preguntas adicionales para clarificar.

Porque solo le podrás sacar un buen partido a este tecnología sí tienes conocimientos previos sobre la temática en cuestión.

La clave está en: “to prompt or not to prompt”

Ingeniería de prompts. No me considero un experto, pero mis pruebas a lo mejor te pueden inspirar en cómo sacarle partido.

Ya sabes que una pregunta de calidad obtiene una respuesta de calidad.

En inglés dicen: “garbage in = garbage out”

Y esto fue lo que le pregunté.

Con el resultado habría que testar su calidad para volver a reformular y ser así más conciso.

¿Adaptarse o morir? ¿Qué piensas de esto?

Lo que está claro es que el dilema de la hoja en blanco queda erradicado.

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